https://iclfi.org/pubs/ai/2/despierten
El siguiente artículo fue publicado como suplemento de Spartacist el 7 de mayo.
Toda la izquierda está en negación. Milei avanza con su plan reaccionario de aplastar al movimiento obrero y vender el país a los imperialistas. Pero la verdad es que no se enfrenta a ninguna oposición seria. La burocracia sindical está traicionando descaradamente nuestros intereses: aunque organizan manifestaciones y paros de vez en cuando, han mostrado claramente que no quieren confrontar al gobierno. En realidad, han hecho lo contrario. Su podrido “Contrato Social” con el gobierno vende a los trabajadores a Milei. Si la trayectoria actual continúa, el movimiento obrero sufrirá una derrota histórica con consecuencias catastróficas para toda América Latina.
Pero la izquierda se rehúsa criminalmente a cambiar el curso de los acontecimientos y desafiar a la actual dirección del movimiento obrero. Pueden criticar a la burocracia sindical y llamar a paros nacionales, pero no buscan movilizar a la base de los sindicatos para repudiar la traición de sus direcciones y luchar contra el saqueo nacional.
Esta bancarrota se vio nítidamente el 1° de mayo. Con argumentos de que la burocracia sindical está totalmente desprestigiada y que no hay ilusiones en ella, o tratando a los trabajadores que van a las protestas de la CGT como si fueran cómplices de las traiciones de sus dirigentes, la mayoría de la izquierda boicoteó la manifestación sindical y llamó a manifestaciones “independientes” separadas del grueso de la clase obrera. En lugar de ofrecer a las decenas de miles de trabajadores sindicalizados una oposición real a la burocracia de la CGT, la izquierda se aisló en su propio castillo. Esto significó dejar a la clase obrera en manos de su dirección peronista sin ningún desafío.
El propio FIT-U no tiene ni idea de cómo avanzar la lucha. Celebró la masiva movilización del 23 de abril contra la amenaza de cierre de las universidades. Pero al día siguiente, todo el mundo estaba de vuelta en las universidades como si nada hubiera pasado. No se han convocado más movilizaciones ni huelgas universitarias. Nadie tiene una propuesta seria sobre cómo llevar adelante la lucha para derrotar a Milei posterior al paro del 9 de mayo.
La izquierda debe cambiar de curso urgentemente. Debe unirse en torno a un plan de lucha claro, llevar este plan a los sindicatos y utilizarlo para echar a los actuales dirigentes traidores. Proponemos el siguiente programa:
¡POR UN FRENTE DE LUCHA CONTRA EL SAQUEO NACIONAL!
- ¡Salarios indexados a la inflación real!
- ¡Revertir todas las privatizaciones!
- ¡Repudiar la deuda externa!
- ¡Echar a Milei!
- ¡Por un gobierno de la CGT, las CTA y el FIT-U!
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