https://iclfi.org/spartacist/es/44/sudafrica
La siguiente contribución fue presentada por nuestros camaradas de Spartacist/South Africa.
Desde el 20 de enero, Sudáfrica se tambalea bajo los ataques de Trump. Desde la suspensión del financiamiento contra el VIH/SIDA hasta la expulsión del embajador, las amenazas de sanciones a los políticos del Congreso Nacional Africano (CNA) y el rompimiento del acuerdo comercial AGOA, todos persiguen un mismo objetivo: chantajear al país diciéndole “O te alineas contra China o te destruiremos”. Existe un entusiasta deseo de defender nuestra soberanía nacional frente a este acoso imperialista. Pero a pesar de este sentimiento, muchos pueden darse cuenta de que el país es como un ciervo paralizado, a punto de ser aplastado por el tren de Trump.
¿A qué se debe esto? ¿Qué hay que hacer para romper la parálisis y preparar una defensa eficaz? Para empezar, es imposible defenderse sin enfrentarse a la Quinta Columna del capital monopolista blanco que ayuda a Trump y Musk desde dentro del país. El respaldo del imperialismo estadounidense es existencial para los randlords. Harán todo lo posible por mantenerlo, aunque esto arruine la economía sudafricana. Para luchar contra el enemigo interno, debemos enfrentarnos a las políticas de los partidos que dirigen a las masas negras, que refuerzan cada uno a su manera la parálisis nacional. Desde la Alianza Tripartita liderada por el Congreso Nacional Africano hasta el uMkhonto weSizwe (MK) de Jacob Zuma y los Economic Freedom Fighters (EFF), todos proclaman en mayor o menor medida la necesidad de resistir a los dictados de EE.UU. y oponerse a la subordinación económica a Occidente. Pero sus estrategias acaban desorganizando y obstruyendo una lucha real contra el imperialismo estadounidense. A pesar de sus diferencias políticas, todas se basan en vincular la lucha contra Trump a los intereses de las élites negras, que están fracturadas, débiles y estranguladas por el capital monopolista blanco, pero que al final están dispuestas a sacrificar el interés nacional en beneficio de sus propios intereses estrechos.
Con el CNA, esto está claro para cualquiera que esté dispuesto a verlo. Ya han formado un gobierno de coalición, el Gobierno de Unidad Nacional (GNU), con partidos abiertamente pro imperialistas y dominados por los blancos, como la Alianza Democrática (AD), y están acelerando las privatizaciones y destrozando los derechos sindicales. No tienen ninguna intención de luchar seriamente contra Trump y su Quinta Columna, lo cuál sólo podría hacer saltar por los aires al GNU. En vez de eso, el CNA se aferra a la fantasía de trazar una “vía intermedia” entre Estados Unidos y China, con la esperanza de que las relaciones puedan arreglarse si Ramaphosa habla con Trump, ¡y expone las falacias de la propaganda racista de Afriforum! En su defecto, los jefes del CNA depositan sus esperanzas en los imperialistas menores europeos y en la OMC para que defiendan al país como parte de la defensa del orden liberal mundial. Esto no hará nada para detener a Trump. Lo único que hará es repeler a aquéllos que tienen un interés objetivo en defender Sudáfrica y otros blancos del imperialismo estadounidense: los trabajadores del Sur Global y Occidente.
¿Qué pasa con MK y los EFF? Como principales partidos de oposición al GNU, son mucho más estridentes a la hora de denunciar a Trump, censurando la débil respuesta del CNA. Piden un cambio en la política exterior en respuesta a los aranceles estadounidenses: abandonar la fantasía de la “no alineación” y aliarse con China y otros países que desafían la hegemonía estadounidense. Si bien esto apela al apetito de las masas para resistir al imperialismo estadounidense, MK y los EFF les dicen que esto se puede llevar a cabo de mejor manera a través de medidas gradualistas y parlamentarias. Al nivel nacional, presionan para que Ramaphosa eche a la AD del GNU y los incorpore a ellos; al nivel internacional, voltean hacia Xi, Putin y otras élites del Sur Global en el BRICS+. En lugar de forjar la unidad antiimperialista, esto juega a favor del divide y vencerás imperialista: ya vemos a los jefes del BRICS+ enlistándose en la guerra comercial de Trump, mientras que Tshisekedi de la República Democrática del Congo y otras élites africanas también se están alineando detrás del amo estadounidense. Esta estrategia sólo conducirá a la derrota. En lugar de preparar a las masas para defenderse, las adormece en la pasividad.
Los líderes del EFF ponen una cara radical a la estrategia nacionalista, apelando a los ánimos militantes de su base para defenderse de la competencia del MK, por ejemplo, hablando de la necesidad de la lucha de clases contra el imperialismo y proclamando 2025 como el “Año de los piquetes de huelga”. Al mismo tiempo, han ofrecido constantemente al EFF como socios de coalición a la espera del llamado de Ramaphosa, dispuestos a apuntalar el gobierno si el CNA se cansa de doblegarse ante la AD. Al final, este acto de equilibrismo confunde y desorganiza al sector más combativo de las masas. Con una estrategia así, por supuesto que no vas a hacer lo necesario para organizar a las masas para la lucha.
La tarea de los revolucionarios en esta situación es defender a los oprimidos contra Trump sobre líneas de la lucha de clases. Esto agudizaría la contradicción entre las aspiraciones antiimperialistas de las masas y la estrategia nacionalista de su dirección. Es lo contrario de lo que está haciendo la mayor parte de la izquierda marxista, que es ceder la lucha a los nacionalistas. Algunos incluso declaran que “los trabajadores no tienen bando” en la guerra comercial entre EE.UU. y China. ¡No! Debemos tomar partido con China en la guerra comercial de EE.UU. y reforzar la colaboración económica. Para que esa colaboración tenga una base sólida, que fortalezca la unidad antiimperialista contra EE.UU., debe basarse en las necesidades de las masas trabajadoras, en Sudáfrica, en todo el continente y en China. Esto significa luchar por una dirección y una estrategia diferentes.
- Para luchar contra Trump y la AD, ¡hay que echar a los carniceros de Marikana!
- ¡Combatir el ataque brutal al empleo! Nacionalizar sin indemnización las fábricas, las minas y las granjas de propiedad extranjera que despidan trabajadores.
- ¡Por la unidad antiimperialista! Trabajadores en África y China: Elijan delegados para elaborar un plan económico quinquenal conjunto destinado a contrarrestar los aranceles de Trump y abordar los problemas urgentes del desarrollo nacional.
- De Lagos a Nairobi, de El Cairo a Ciudad del Cabo: ¡Repudiar la deuda con los imperialistas chupasangre!